Amazonas con pinta de oveja.


Hoy mi madre me ha preguntado que cómo estaba. Te echo de menos. A medias y sin ellas. Echo de menos ver cómo te subes a la mesa borracha y te pones a bailar como si fuera tu primera vez y te diera igual marcharte. Echo de menos que me digas que las mujeres también soléis beber cerveza. Y ver cómo competimos para ver quién bebe más y, en el último momento, da una carcajada al aire. Echo de menos mirarte sin prisa, aunque lleguemos tarde y seas completamente mía y de mi cama esa noche. Ver cómo te subes el vestido con una sensualidad que pararía Gran Vía, decirme con los ojos que te suba la cremallera en señal de que te lo vuelva a quitar y te folle en la cómoda. Echo de menos que me llames a altas horas de la noche porque no puedes dormir por el dolor de cabeza y me dices que también me echas de menos. Te juro que ahí vi la felicidad. Recorrería mundos si acabo en ti.

Le he dicho que estaba bien, que ya no te veo. (Ojalá te viera una y otra y otra vez.)
Me sonríe como pensando que sabe que miento. Vuelve a mi cama, a mis noches. Ya no hay quién me salve de mí. Llámame. Joder, sí. Joder, echo de menos hasta verte enfadada cuando te decía que yo te quería más y tú te picabas. Niñato me decías. Mi niña siempre te diré yo con estos ojos llorosos que saben que estás de paso y yo quisiera ser todo el viaje. Sin querer que te vayas. Sin poder hacer nada...
Tienes que volver a pasarte por mi portal, por si, en algún descuido, nos miramos a los ojos y te vuelves a enamorar. Pequeña estrella fugaz, pero tan brillante que te asemejan con el Sol.
Supongo que ya no te preocuparas por los celos ni de que cuando alguien pasara y se te quedara mirando te cogiera del culo, te acercara tanto a mí y te besara alejando a esos capullos.

Y dime, amor mío, ¿de qué te ha servido marcharte y no llevarte los recuerdos? ¿Quién me salva ahora o, mejor dicho, quién te salva a ti? No te pido que te quedes, pero aparece y arregla lo que nos queda. Aráñame entero y susurra que siempre fuiste una chica libre y que por eso te volviste musa, viajera y amazona.

-Colocarn0s.

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